Después de un mal comienzo, el smartwatch italiano I’m Watch llega finalmente a los mercados. se autoproclama el “El primer smartwatch verdadero del mundo”, grandes expectativas se han creado alrededor de este smartwatch estéticamente agradable. ¿Sobrevivirá el I’m Watch al Hype? sigue leyendo para descubrirlo…
Sus tripas son bastante conocidas un micro-pocesador a 400 MHz con unos escasos 128 MB de RAM y la desproporcionada cantidad de 4 GB de memoria para el almacenamiento interno. El hecho de que tenga tan poca memoria se adolece nada más empezar a jugar con él y la CPU algo escasa tampoco es que ayude demasiado y se detectan tirones y saltos en las animaciones de la interfaz gráfica. No entedémos como los fabricantes de smartwatch se muestran tan generosos con la memoria de almacenamiento y tan tacaño con las especificaciones técnicas.
Este smartwatch ganaría muchos puntos si la situación fuera la contraría, mucho procesador y memoria y poco almacenamiento, que me permita moverme por el con total fluidez y abriendo aplicaciones al intante, es mi opinión. Para el almacenamiento e imagenes ya tenemos todos un smartphone que se hace obligatorio usarlo con el smartwatch que además se sincroniza en la nube.
Nada más empezar a abrir la caja de su caja minimalista emerge un aroma a "Apple" pero con unas calidades un tanto inferir. El manual es escueto y poco práctico unido a un FAQ casi inexistente que requiere una dosis de internet y descubralo usted mismo.
Después de utilizarlo por un tiempo se llega a la conclusión de que solo hay una única cosa que hace bien aparte de dar la hora... se siente genial en la muñeca. Su diseño fruto de los mejores maestros Italianos del diseño se nota en cada pulgada del Im Watch. Si consiguen mejorar la experiencia de usuario para una posible revisión 2 del I'm Watch este smartwatch será un duro competidor del mercado, mientras tanto puedes mirar a el Pebble smartwatch uno de los mejores smartwatch del mercado.
